Diferencia entre revisiones de «DISPOSICIÓN DE LOS FRUTOS»
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Como se puede ver, la orientación de las fructificaciones de las imágenes anteriores no puede decirse que sean erectas ni colgantes. | Como se puede ver, la orientación de las fructificaciones de las imágenes anteriores no puede decirse que sean erectas ni colgantes. | ||
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NomenPlantor<sup>®</sup><br> | |||
'''Guillermo Fdez. Weigand''' |
Revisión actual - 07:08 26 may 2018
La disposición de los frutos sobre sus ramas nos puede servir para identificar un ejemplar, incluso desde la distancia. En particular, los abetos y las piceas (o falsos abetos) se distinguen fácilmente porque los primeros presentan sus piñas erectas y los segundos colgantes. Recuerda que en NomenPlantor a toda estructura que acompaña a las semillas la llamamos fructificación, si bien en las plantas gimnospermas no son realmente frutos.
FRUTOS ERECTOS
Los frutos erectos son aquellos que se disponen verticalmente, hacia arriba. Si son más largos que anchos pueden tener el aspecto de velas o cirios, pudiendo ser muy estéticos.
Como ya te habrás dado cuenta si llevas tiempo aprendiendo botánica, esto no son matemáticas. En un mismo ejemplar puedes llegar a encontrar frutos perfectamente erectos y otros que estén ligeramente inclinados. No pasa nada. En ambos casos podemos hablar de fructificaciones erectas. Si la desviación con respecto a la vertical no supera los 30º a 45º podemos mantener que son frutos erectos.
FRUTOS COLGANTES
Los frutos colgantes son aquellos que se disponen verticalmente, hacia abajo. También pueden ser muy estéticos.
De la misma forma que en otras disposiciones, no es imprescindible que estén perfectamente aplomados. Pueden tener una pequeña desviación con respecto a la vertical y podrán seguir siendo considerados colgantes.
Los frutos que más o menos que tienen un pedúnculo largo y fino son todos ellos colgantes ya que el peso del fruto les obliga a ello. Es el caso típico de las cerezas y las guindas. También ocurre algo similar con frutos muy pesados con un pedúnculo más grueso que el descrito previamente, como puede verse en la imagen superior derecha.
OTRAS DISPOSICIONES
Cuando no son claramente ni erectos ni colgantes suele ser porque el pedúnculo es muy corto o inexistente, lo que hace que se queden pegados a la rama de la que salen, adoptando la posición en función del punto de anclaje. Otras veces ocurre que el pedúnculo es muy rígido y puede tener cualquier orientación, lo que obliga a la fructificación a tener, igualmente, diferentes posiciones.
Como se puede ver, la orientación de las fructificaciones de las imágenes anteriores no puede decirse que sean erectas ni colgantes.
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Guillermo Fdez. Weigand